La búsqueda de nuevos imaginarios sexuales nace de la necesidad de crear medidas que empoderen y satisfagan las, tantas, realidades ignoradas. El fin es la creación de imaginarios que cuestionen tanto las prácticas sexuales como los roles de género, la orientación sexual y las normas de conducta en cuanto a la disyuntiva que se plantea frente a la monogamia.
A través del análisis de las imágenes estereotipadas que, a todos los niveles, marcan el día a día visualmente, y gracias al uso de las mismas como materia prima, se produce un acercamiento a los mecanismos de atracción de masas, y por ende a un público más amplio y menos especializado.
La fragmentación y manipulación de las películas seleccionadas, convertidas a formato GIF, permite descontextualizar la imagen, y, gracias a la repetición en bucle, banalizarla, ridiculizarla y despojarla de su significado original.
El uso de escenas inherentemente sexuales consigue tornarse duda cuando, privando al espectador de ¨ el final ¨ de lo que se considera el acto sexual en nuestra sociedad heteropatriarcal (es decir, el coito), no se muestra el contexto ni la continuidad de las mismas. De esta manera, el acto se encuentra aislado y deshumanizado, proporcionando un terreno más amplio para las interpretaciones.
El texto (Chico/Chica/Chicx) y la narración, que se produce a nivel interno en el espectadorx en cuanto estx lee, cuestionan lo que se considera evidente con el fin de provocar una duda más profunda, que traspase las imágenes seleccionadas.
Películas
9 songs – Michael Winterbottom
2046 – Wong Kar-Wai
Boys culture – Q. Allan Brocka
Boys don´’ t cry – Kimberly Peirce
Caramel – Nadine Labaki
Carne Trémula – Pedro Almodóvar
Circumstance – Maryam Keshavarz
Things We Lost in the Fire – Susanne Bier
Diario de una ninfómana – Christian Molina
Do começo ao fim – Aluisio Abranches
Drive – Nicolas Winding Refn
El habitante incierto – Guillem Morales
Elegy – Isabel Coixet
En la cama – Matías Bize
Habitación en Roma – Julio Medem
My name is Harvey Milk – Gus Van Sant
Kids – Larry Clark
La double vie de Véronique – Krzysztof Piesiewicz
Malcom X – Spike Lee
Orlando – Sally Potter
Peindre ou faire l’amour – Arnaud Larrieu & Jean Marie Larrieu
Revanche – Götz Spielmann
Shortbus – John Cameron Mitchell
Torremolinos 73 – Pablo Berger
Transamerica – Duncan Tucker
Partiendo de la premisa de que el lenguaje construye, el planteamiento de este trabajo se centra en el uso de dicho lenguaje como constructor de nuevas realidades.
A través de la reapropiación y la repetición del estigmatizado término zorra, se propone al espectador la normalización y el empoderamiento del término, no solo como hecho aislado, sino como propuesta política y vital.
El uso, tanto de biomujeres como de biohombres, supone la ampliación del conflicto más allá del sometimiento de un género frente a otro, ya que además de a la idea de sexo y género, amplia el campo a las prácticas sexuales y la orientación del deseo. Es decir, se cuestiona qué tipo de prácticas están bien valoradas socialmente, cuáles no y quién puede, y quien no, llevarlas a cabo. Al asignar el mismo término (considerado del todo peyorativo y restringido a la denominación de ciertas mujeres) tanto a biomujeres como a biohombres se acentúan las prácticas por encima del género.
El lenguaje aparece representado a través de los dos canales de la comunicación: el verbal y el escrito. De este modo, la utilización del neón como elemento narrativo y literal del lenguaje apoya a la narración verbal. Además de ser un elemento visual partícipe en la composición, es el elemento que marca el ritmo a nivel formal. Su formato, totalmente conectado con lo publicitario, recuerda a los luminosos que, sin especificarlo claramente, anuncian sexo.